El 24 de octubre, el histórico edificio de la CEPAL fue el escenario de una conmemoración del Día de las Naciones Unidas distinta a las anteriores. Esta vez, la celebración giró en torno a la participación activa de las juventudes, invitando a Uno Punto Cinco y a su directora, Ismaela Magliotto, como protagonistas del evento. Su mensaje fue claro: "el futuro ya llegó, y es tiempo de que los jóvenes ocupen los espacios que les corresponden para construirlo."
Un mensaje urgente: “El futuro no puede esperar”
En su intervención, Ismaela rompió con la narrativa tradicional que posiciona a los jóvenes como actores del futuro. “Nos llaman la generación del mañana, pero estamos aquí y estamos trabajando ahora. No queremos ser espectadores de las decisiones que van a definir nuestra vida”, enfatizó. Ismaela hizo un llamado a integrar a la juventud en los procesos de toma de decisiones de manera real y efectiva, asegurando que solo así es posible construir un mundo más justo y sostenible.
El discurso de Ismaela no fue solo inspirador; fue también un diagnóstico preciso de la realidad actual. Señaló que, según los últimos reportes del IPCC, las generaciones más jóvenes enfrentarán las peores consecuencias del cambio climático. Además, destacó que el 83% de las metas de los ODS aún no muestran avances significativos: “Las cifras son alarmantes, pero no definitivas. Tenemos el tiempo y la capacidad de revertir esta situación, pero debemos actuar ya”.
Hackatón del Futuro: Innovación juvenil para desafíos globales.
La Hackatón del Futuro fue uno de los momentos clave de la jornada, organizada por ONU Chile en colaboración con TVN y el programa La Ventana. Este espacio permitió que jóvenes presentaran soluciones innovadoras para avanzar en los ODS desde diversas perspectivas. Las propuestas mostraron que la juventud no solo tiene energía, sino también ideas frescas y viables para enfrentar los desafíos globales.
Las Minicharlas por los ODS permitieron un diálogo intergeneracional con representantes de UNESCO, Pacto Global y la UIT, donde los jóvenes compartieron sus experiencias en proyectos que buscan transformar sus comunidades. Estas instancias dejaron claro que los cambios más profundos solo se lograrán con la participación activa de todas las generaciones.
Más que celebración, una invitación a la acción
La jornada también estuvo marcada por momentos culturales que reflejaron la importancia de la diversidad y la inclusión. La Orquesta Eleva, compuesta por músicos con discapacidades, la soprano aymara Sandra Caqueou y el coro DOREMIFAO de funcionarios de la FAO, llenaron el espacio con música que conectó a los asistentes en un espíritu de comunidad y colaboración.
“Construyamos el futuro juntos”
Para Ismaela, el verdadero reto no es solo abrir espacios a los jóvenes, sino que estos espacios se conviertan en puntos de encuentro para construir en conjunto: “No se trata de trabajar para los jóvenes, sino con nosotros. La juventud tiene el talento y la visión necesarios, pero no podemos hacerlo solos. Necesitamos colaboración radical y sincera”.
Su mensaje resonó más allá de las paredes de la CEPAL: la construcción del futuro no es una tarea para mañana, sino para hoy. La participación juvenil no puede ser simbólica ni postergada; debe ser real, presente y constante.
Esta conmemoración del Día de las Naciones Unidas, con Uno.Cinco y Ismaela en el centro, fue un recordatorio de que el futuro se está definiendo en este momento. Cada decisión que se toma hoy tendrá un impacto directo en las generaciones que lo habitarán. Y como bien dijo Ismaela para cerrar su intervención: “Si somos quienes vamos a vivir ese futuro, tiene todo el sentido que también lo construyamos desde ahora”.
Comments